Náhuatl: el idioma de los aztecas que hablan hoy 1,5 millones de personas

Artículo revisado y aprobado por nuestro equipo editorial, siguiendo los criterios de redacción y edición de YuBrain.

El náhuatl era el idioma que se hablaba en el Imperio Azteca, también conocido como «mexica». Aunque desde la época prehispánica la forma hablada y escrita del idioma ha cambiado, el náhuatl sigue siendo una lengua viva desde hace más de 500 años. Actualmente, todavía lo hablan cerca de un millón y medio de personas en México.

Qué significa náhuatl

Se cree que el término náhuatl con el cual hoy denominamos al idioma, deriva de nāhuatlahtōlli. Esta palabra está formada por nāhuatl, que significa «sonido claro» o «sonido agradable» y la palabra tlahtōlli, que significa «lengua» o «palabra». Al idioma o las comunidades náhuatl también se los conoce como «nahua».

Origen del náhuatl

El náhuatl forma parte de la familia yuto-nahua o uto-azteca. Esta es una de las más grandes dentro de las lenguas nativas americanas. La familia uto-azteca o yuto-nahuan incluye unas sesenta lenguas norteamericanas. Algunas de ellas son el comanche, el shoshoni, el paiute, el tarahumara, el cora y el huichol.

La lengua náhuatl probablemente se originó en las regiones norte y sur de Sonora, México, en la época prehispánica. En el siglo XVI d.C, el náhuatl ya era la lengua más hablada de toda Mesoamérica.

Distribución geográfica

Con el desarrollo del Imperio Azteca y la fundación de su capital en Tenochtitlán en los siglos XV y XVI, el náhuatl se extendió por toda Mesoamérica. Su distribución geográfica incluía lo que hoy es el norte de México hasta Costa Rica, y también otras partes del sur de Centroamérica.

En 1570, el rey Felipe II estableció medidas legales que reforzaron el estatus del náhuatl como lengua popular. Se utilizó en la conversión religiosa y también como legua para la formación de eclesiásticos que trabajaban con nativos. Los nobles españoles también utilizaron el náhuatl para comunicarse.

Características del idioma náhuatl

Hoy en día el idioma presenta variaciones tanto lingüísticas como culturales. Existen tres dialectos principales del grupo conocido como nahua. Los aztecas gobernaban desde el Valle de México y llamaron a su idioma náhuatl. Al oeste del Valle de México, el dialecto se llamó nahual. El tercer grupo, ubicado al sur de México y luego en otros lugares de Centroamérica, utilizaba el dialecto náhuat.

Fuentes de conocimiento del idioma náhuatl

El conocimiento del náhuatl en la actualidad se debe principalmente al aporte de dos códices antiguos. Se trata de documentos que contienen información valiosa que describe al idioma, sus características y la cultura azteca. Estos son:

  • El Códice florentino: dentro de este códice se encuentra el libro Historia General de la Nueva España, escrito por fray Bernardino de Sahagún (1500-1590), a mediados del siglo XVI. Se trata de la fuente más extensa en lengua náhuatl y consta de doce tomos. Es una recopilación, similar a una enciclopedia, del idioma y la cultura de los aztecas. Este texto tambien contiene partes escritas en español y transliteraciones del náhuatl en el alfabeto del latín.
  • El Códice Mendoza: el rey Carlos I de España (1500-1558) encargó que se elaborara este documento. Fue escrito a mediados del siglo XVI por hábiles escribas nativos y supervisado por clérigos españoles. El códice incluyó glosas tanto en náhuatl como en español. Además, incluyó la historia de las conquistas aztecas, información sobre los tributos pagados a los aztecas por provincia geográfica, y relatos de la vida cotidiana azteca.

La escritura del náhuatl

El náhuatl clásico utilizaba alrededor de 15 consonantes y cuatro vocales, que podían ser largas o cortas. Su gramática incluía el uso de sufijos y prefijos, palabras compuestas y la repetición de sílabas.

La escritura era pictográfica, ideográfica y fonética:

  • En la fase pictográfica se utilizaba el dibujo como expresión; por ejemplo, si se deseaba indicar una planta, se dibujaba.
  • En la fase ideográfica se utilizaba un signo para indicar un concepto que era difícil de dibujar. Por ejemplo, si se quería representar el habla, se pintaba una línea que salía de la boca del individuo.
  • En la escritura fonética se representaba un objeto para indicar un sonido. Por ejemplo, el símbolo para señalar el agua indicaba el sonido de la “a” y un guisante indicaba el sonido de la “e”.
Códice florentino
Códice florentino

Ejemplos de palabras de origen náhuatl

En español utilizamos varias palabras que provienen de la lengua náhuatl, como por ejemplo chocolate, chile, aguacate, cacahuate, cacao, coyote, mole, tamal, zopilote y tomate. Muchos de los nombres de lugares de México y América Central también son el resultado de una transliteración al español de sus nombres en náhuatl. Este es el caso de México y Guatemala.

Los sonidos del náhuatl

Los lingüistas pueden estudiar y definir los sonidos originales del náhuatl clásico en parte porque, según lo mencionado anteriormente, los aztecas usaban un sistema de escritura glífica que incluía elementos fonéticos. Posteriormente, los eclesiásticos españoles asociaron el alfabeto fonético del latín con los sonidos que escuchaban de los lugareños.

Los alfabetos náhuatl-latinos más antiguos que existen son de la región de Cuernavaca (México) y datan de finales de la década de 1530 o principios de la de 1540. Estos alfabetos, probablemente, fueron escritos por indígenas y compilados por frailes franciscanos.

La arqueóloga y lingüista Frances Berdan proporcionó una pequeña guía de muestra de la pronunciación del náhuatl clásico en su libro Aztec Archaeology and Ethnohistory (2014). En ella indica, entre otras cosas, que:

  • En el náhuatl clásico el acento principal o énfasis en una palabra casi siempre ocurre en la penúltima sílaba.
  • Existen cuatro vocales principales en el idioma: «A» como en la palabra «palma», «E» como en «apuesta», «I» como en «si», y «O» como en «soy».
  • El sonido «tl» no se pronuncia exactamente como «taehl», sino más bien como una «t» glotal y una pequeña bocanada de aire para la «l».
  • La mayoría de las consonantes en náhuatl son similares a las del español o el inglés.

Las palabras náhuatl como códigos

Otra característica fundamental del náhuatl es su sigificado codificado. El sacerdote y cartógrafo José Antonio Alzate (1737-1799) sostenía que los nombres náhuatl podían ser útiles para la clasificación botánica del Nuevo Mundo, principalmente porque codificaban un mayor conocimiento de cada espécimen, a diferencia de la denominación griega que se utilizaba en ese momento.

El náhuatl en la actualidad

El náhuatl se sigue hablando en diferentes partes de la Ciudad de México, como por ejemplo, Xochimilco, Tláhuac y Milpa Alta. También se habla en otros estados de México. Algunos de ellos son Nayarit, Aguascalientes, Querétaro, Colima, San Luis Potosí, Jalisco y Puebla. También en Tlaxcala, Veracruz, Oaxaca, Guerrero y en algunas partes de Tabasco y Yucatán.

Según las estadisticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) de México, en la actualidad, una de cada cien personas de la capital de México habla náhuatl.

La lengua náhuatl en peligro de extinción

Después de la Guerra de Independencia de México (1821), se dejó de utilizar el náhuatl como medio oficial de comunicación y documentación. La élite intelectual de México se enfocó en la creación de una nueva identidad nacional. La nueva visión percibía al pasado indígena como un obstáculo para la modernización y el progreso de la sociedad mexicana.

Con el tiempo, las comunidades nahuas se aislaron cada vez más del resto de la sociedad mexicana. Sufrieron lo que los investigadores denominan como una dislocación política, derivada de la falta de prestigio y poder. Y también una dislocación cultural, como resultado de la modernización y la globalización.

En 2014, los resultados de las investigaciones de los etnólogos Justyna Olko y John Sullivan arrojaron datos nuevos sobre el náhuatl. Se comprobó que el contacto prolongado con el español provocó cambios importantes en la morfología y la sintaxis de las palabras del náhuatl. Como en muchos lugares todavía siguen coexistiendo las formas pasadas y presentes del náhuatl, su preservación es esencial.

Según las estadísticas, el náhuatl de Milpa Alta es una de las 364 lenguas en peligro de extinción en la actualidad. Esta ciudad sólo tiene un poco más de 6.000 habitantes.

Para evitar su desaparición y poder preservar y difundir el idioma náhuatl se están llevando a cabo diferentes proyectos. Uno de ellos está a cargo del Instituto de Docencia e Investigación Etnológica de Zacatecas (IDIEZ) de México. En el se anima y motiva a los hablantes de náhuatl para que continúen practicando y desarrollando su idioma y cultura. También se los capacita para que puedan enseñarle este idioma a otros. Asimismo, se los invita a participar activamente en proyectos de investigación con académicos de todo el mundo.

Bibliografía

  • Berdan, Frances F. Arqueología y Etnohistoria Aztecas. (2014) Nueva York. Cambridge University Press.
  • García-Mencía, R.; López-López, A.; Muñoz Meléndez, A. Un audio-léxico español-náhuatl: uso de la tecnología para promover y difundir una lengua nativa mexicana. (2016). Eds. Bradley, L. y S. Thouësny. Research-publishing.net.
  • Espinoza, M. Aprende a hablar náhuatl – Aprende el lenguaje de los dioses: para principiantes (2020). Edición independiente.
Cecilia Martinez (B.S.)
Cecilia Martinez (B.S.)
Cecilia Martinez (Licenciada en Humanidades) - AUTORA. Redactora. Divulgadora cultural y científica.

Artículos relacionados